Sonriendo, con lentes, de lado, foto cortada o volteada, guaguas en lugar de una foto propia, parejas, besos, con la amiga(o), con antifaz, con bufanda cubriendo el rostro, en viaje, de vacaciones o en lugares lejanos, fotos borrosas, rodeada de flores, logos de tal o cual cosa, fotos del ticket del último concierto al que fueron, fumando, más sonrisas, más y más sonrisas, de torso desnudo, saliendo del mar con jeans mojados, arriba de un bote, con su mascota en las manos, fotos del hijo, de madre con hijo o padre con hijo y algunas pocas de familias completas, posando, no mirando a la cámara, oscuras, fotos de infancia, del último carrete, fotos grupales, del equipo de fútbol favorito, del último concierto, fotos a las que se les nota que les cortaron a otra persona que aparecÃa al lado, con micrófono cantando en un karaoke, con cara de serio, con algún monumento histórico de fondo (torre Eiffel o similar, el billete de un profesional da para todo), con un mechón cubriendo parte del rostro, manejando, SMSeando o twitteando, estilo psycho, graduándose o titulándose, la carátula de un disco de su banda favorita, con logos de protesta, a medio sol, de pirata, de huaso, de lentes oscuros, en tono sepia, de personajes de TV de la infancia, con audÃfonos de DJ, de cuerpo completo y jeans, agarrándose el rostro de una o de dos manos, irreconocibles, de lentes grandes, riendo, pelo al viento, sacando la lengua, tomando cerveza, con unos 3 dÃas de barba, pelo crespo, aros grandes, en blanco y negro, chascones, de lentes caÃdos y mirando de frente, tomando una foto con una reflex, en la barra del estadio, de un peluche, de la cordillera, a la rápida de la webcam y a menudo con poca luz, con la cabeza chueca, de sombra o perfil.
Sólo veo el circo de gente que según Facebook tiene algo que ver conmigo.
Estamos en un "carrete". Minas hablando con minas. Hombres, con hombres. Minas... hablando cosas de minas. Hombres, hablando cosas... pues de hombres. Hasta que a uno que está al lado le revientan los temas de minas y comienza a alentar a su grupo a gritar "¡que se vayan las minas!". La respuesta vino del otro lado... pero el final no se lo esperaban.
Al más puro estilo “Soltero busca”, como antiguamente decÃan los avisos de contactos personales en el diario. Sólo que ahora la personalización del perfil con el que a uno lo ven el resto de los usuarios (y supuestamente, la “media naranja”) va más allá e incluso permite especificar poco menos que el nombre de mi gato. Algunas descripciones en los perfiles hacen referencia a lo superficial que puede llegar a ser esto. No son la mayorÃa. Pero uno siempre cae: con suerte la mitad de los perfiles incluyen foto y la verdad es que los perfiles sin foto casi no los tomo en cuenta. Y uno se da cuenta que aunque uno no quiera aplicar la superficialidad, la termina usando igual. Hay minas, y con cariño se los digo, porque me caen bien y ojalá tengan mejor suerte que este pellejo, que no se sacan partido ni por si acaso. Pero hay otras que sin ser un monumento a la belleza saben sacarle mucho provecho a lo que tienen.
Hoy entendà que debÃa reconocer la señal, algo que no hice cuando esa
amiga de media vida, que me llamó por mi nombre sin conocerme a sólo un
par de semanas de clase en la universidad, luego de unos años comenzara
su vida con otra persona tan sólo dÃas antes de que yo le dijera mis
motivos para tenerla conmigo. Con los años te das cuenta que no era para
ti. Con los años. Pero en el momento eso no es evidente y la segunda
parte de la historia, la que corresponde al esfuerzo inútil, no parece
tal. Esa etapa está llena de señales, y mientras más pasa el tiempo, más
señales aparecen y más rápido una tras otra.