Pero la historia no se acabó ahí. Sorpresa nos dio una mañana de sábado del 2003 o 2004 prender la tele y ver en el Vidavisión los clips de las mismas canciones. O sea que también tenían clips. Sólo nos reímos. Y alguna vez fuimos felices con esto, pensábamos.
Y el final, por ahora, llegó de la mano de Internet. El YouTube tiene el poder de traer del pasado hasta lo que se nos olvidó o ni sabíamos que existía. Ahí, y en otros lados más, descubrí que se trataba de una serie de cassettes y videos rotulados con "Magia Celeste" (otra vez, ver imagen). Los productores de este empalagosamente feliz contenido eran una organización internacional llamada "Niños de Dios", hoy "La Familia Internacional". Su fundador fue un californiano de nombre David Brandt Berg, quien escribió lo que sería el libro base de la organización, "Las Cartas de Mo", que básicamente eran material de uso doctrinal. De ahí que se le denomine una secta en lugar de una Iglesia cristiana, ya que no tiene como libro base la Biblia. Este señor Brandt, como buena secta que se precie de tal (¿?) ha sido acusado de abuso sexual y pedofilia (CHAN) y tal ha sido la mala fama, además de haber admitido que la organización andaba en cosas raras, al menos hasta mediados de los ochentas, que sus miembros viven repartidos alrededor del mundo en forma secreta y hasta reclusoria (recontra CHAN). Y efectivamente, la organización/secta ponía en su mensaje un fuerte hincapié en el cielo y en sus profecías del fin del mundo. Además negaban la existencia del infierno, así que si eras de ellos te ibas al cielo sí o sí. Revisar la Wikipedia y este artículo en Catholic.net y este otro también en donde se agrega la práctica de técnicas proselitistas. Y si quiere lo revisa también en varios videos que andan dando vuelta en YouTube. Chan final.
En fin, como muestra, uno de esos clips o "Chiqui Videos" ("Kiddie Viddie", su nombre original en inglés) cuya música formaba parte además de ese cassette con la amorosa leyenda "Magia de Amor" en el lomo. Fueron producidos entre 1983 y 1986 y lograron distribuir millones de estas cintas alrededor del mundo en distintos idiomas. No está de más la advertencia, si tienen niños chicos y no quieren tener que escucharlas a cada rato de boca de su primor, recomiendo discreción y que no estén cerca del computador.
Con o sin polémica, acusaciones de perversiones y orgías varias, y como siempre lo digo, uno ve lo que quiere ver y escucha lo que quiere escuchar.
EXPLÍQUEME CÓMO ESTE SEÑOR QUE SE HACE LLAMAR INDIO NIJARPA SIGUE EN TELEVISIÓN, EN CIRCUNSTANCIAS QUE EN REPETIDAS VECES HA SIDO DENUNCIADO A TRAVÉS DE PROGRAMAS DE TELEVISIÓN QUE ES UN CHANTA DE ÚLTIMA CATEGORÍA. EXPLÍQUEME, CONSEJO NACIONAL DE TELEVISIÓN, POR FAVOR, CÓMO ESTO ES POSIBLE Y POR QUÉ NO HAY NINGUNA FORMA DE MANTENER EXPULSADOS DEL PAÍS A ESTAS MIERDAS RANCIAS. POR FAVOR.
Por qué cortaré la TV por cable (o por satélite, o por lo que sea)
- Por Canal Preto
- abril 09, 2011
Pero vamos por parte.
Punto 1: Nuestra historia con Movistar
Recuerdo que el día en que
Cuando tuve mi primer trabajo, recordando lo genial que era tener TV cable a fines de los 90s (primero "colgados" de VTR que lo pagabamos a medias con una vecina, y luego con un plan con Metrópolis, como corresponde), no esperamos más. Era tanto el entusiasmo por tener "cable" de nuevo que, según recuerdo, hasta el excesivo tiempo que nos tenían en su call center en incesantes pasadas de pelota (casi una hora) no nos importaba. Finalmente, por suerte, y no como en este artículo de Fayerwayer (que, ojo, en todo lo demás no miente), los técnicos llegaron a instalar, con mal tiempo y todo. Y la señal no se cayó nunca por la lluvia, como muchos nos dijeron.
Pero la calidad de la imagen... decepcionante. Cómo duramos tanto. Por el monopolio que tenían ahí, supongo. Mi hermana odiaba los callcenters ecuatorianos, colombianos, peruanos, etc., que no se les entendía nada, etc, etc, etc. Así que casi siempre terminaba contratando y descontratando cosas yo mismo, por teléfono.
Pero la cuenta comenzó a subir cada mes, a punta de planes de canales premium, megas de banda ancha y planes de telefonía con minutos ilimitados pero sin tiempo para usarlos. Llegábamos a pagar casi 70 lucas a la gran M todos los meses y la verdad es que no nos sentíamos "más felices" mes a mes. ¿Cómo puede ser... si en esa promoción de la tele ofrecen pack HD por 4 lucas? La razón se caía de obvia: en general todas las compañías luchan por atraer nuevos clientes y por eso son tan notorios los "ofertones" para quienes se vayan sumando, no así para los que acumulamos años. Conozco gente campeona olímpica en aprovechamiento de promos, que si le ofrecen un par de meses sin pagar algún plan premium, lo toma y descontrata el último día para contratar de nuevo y seguir con la misma promo un par de meses más. Carerrajismo puro. Lo siento, esa cochiná no va con mi moral. En la gran M, al menos para Chile, tienen ejecutivos dedicados a retención, que derechamente ofrecen ofertones para que uno no se vaya. En particular, nos ofrecieron conservar todo lo contratado pagando la mitad por 3 meses. No gracias, eso no fue na lo que le pedí.
Y finalmente, lo que pudo terminar como un adiós lindo... también fue un problema. Esa manía de NO PROGRAMAR las citas para las (des)instalaciones terminó en malentendido toda una semana, al punto de dejar una nota a mano con el conserje. Así de rasca. ¿No cachan que la gente trabaja y que la pueden llamar por celular?
Así, la primera razón tiene que ver con plata, pero más precisamente, que el servicio no vale lo que estabamos pagando.
Punto 2: El futuro de las señales de pago
Durante la semana, en un artículo de algún Mercurio de los que llegan a la clínica (pondría el link pero los canallas de Emol cobran a la semana de publicado), me llamó la atención un artículo que señala que, según los principales ejecutivos de las señales de pago, la gente quiere más cine doblado al español en lugar de subtitulado. Adicionalmente, señalan que los únicos reductos donde seguirán reinando las películas sin cortes y en idioma original será en los paquetes premium.
Así, al menos en cuanto a películas, las ventajas del sistema cerrado ya no son tales: comerciales a cada rato, incluso en Cinecanal y Cinemax, emblemáticos por su status especial pese a no ser tan exclusivos, películas cada vez más añejas (porque se les cedió el prilegio de emitirlas antes... adivinen a quienes) y todo lo cual, a la larga, se termina transformando en otro impulso a la piratería. Yo les inventaría un eslogan, por si lo quieren ocupar: "Antes que en HBO... y a luca".
Retomando el tema de la supuesta preferencia de los clientes por el cine doblado, en realidad es una decisión que según estos ejecutivos, debió tomarse ante el plan de negocios de las compañías de TV que, para poder ofrecer un servicio "accesible", había que degradarlo (cuando contratamos Telefónica TV en su tiempo, había planes desde 10 lucas). En efecto, el TV cable era mucho más caro antes. Recuerdo que el plan más barato de Metrópolis a fines de los 90s se empinaba sobre los 20 mil pesos.
Por breves momentos casi me había dejado impresionar la oferta de VTR y su d-Box (la tienen allá en la clínica), una experiencia de usuario que no es la quintesencia, pero que está muy por sobre lo que pueda ofrecer Movistar. Sin embargo, siento que me voy a ahorrar unas buenas lucas por un servicio que casi no usamos, sin contar la telefonía fija ilimitada que a uno se la tratan de meter hasta por los dedos de las patas.
Concluyendo, son otros tiempos. Basta mirar en cualquier población la cantidad de parabólicas en los techos. Lo que es yo, adiós a la mía. No la he sacado porque no encuentro la Stillson o algún alicate... Sólo por eso.
Así que eso significa el punto, tanto en un twitt como en una actualización de estado en Facebook. No sé si servirá o no y desconozco si hay más personas que lo hacen. Pero me deja una sensación menos mala que si me quedara callado.
En la tele ya había mucho de Nintendo dando vuelta, promociones en que regalaban consolas o juegos por juntar tapas de yogurt. Por ese tiempo acostumbrábamos ir de visita a casa de unos tíos. En realidad no eran tíos, sino que gente que vivía en la pieza de atrás de la casa de una tía. Eran un matrimonio joven con dos niñas mellizas, que les decíamos "las monitas" porque eran morenitas y andaban inquietas moviéndose y jugando todo el rato. El padre era, por lo poco que recuerdo, técnico informático y si bien no abundaba el billete, sí podían darse algunos lujos, teléfono, su tonta tele de 21 pulgadas (que en ese tiempo eran caras) y varias otras cosas, incluyendo una consola Super NES. La primera vez que jugué Mario fue en esa casa. De otro mundo.
A los pocos meses, gracias a un crédito de cierta tienda (que en esa época su tarjeta era dorada y salía una foca) mi viejo se entusiasmó y nos regaló una NES. ¿Por qué una NES y no una Super NES? Porque mi viejo no tenía idea. O porque justo en esa sucursal no habían Super NES. Recuerdo que habían tres consolas a la venta: la Sega Génesis, la NES y... créalo, en el '94 aún vendían ¡una Commodore! Y como yo era novato pa esas cosas, me quedaba contento viendo un mono que se moviera. Y si ese mono era Super Mario, genial.
Pasaron horas, días, meses de diversión y adicción sólo con el juego que traía la consola, el mítico pack doble con SMB y Duck Hunt. Tan adicción resultó ser, que mi viejo, para que yo no jugara, un día se llevó el juego, con tan mala suerte que se metió un boleto de micro en la funda. Así, para cuando nos levantaron el "castigo", al meter el juego de nuevo a la consola, el boleto quedó trabando los contactos. Un par de contactos se deformó y previendo que el arreglo no saldría barato, al final mi viejo le metió un cuchillo de cocina para enderezarlos. Y si bien no quedaron perfectos, al menos no hacían contacto y permitían jugar otra vez.
Hoy al llegar al departamento fui a sacar la enorme caja azul donde guardé la NES cuando dejé de usarla. De primera no prendía. Al poco rato me acordé que el transformador original se había quemado, pero tenía otro transformador universal que aunque no daba exactamente el rebuscado voltaje de 8.5 volt (daba 9), sirvió igual. Y funcionó como el primer día.
Y recordé épocas cuando no andábamos detrás del famoso chip para jugar copias piratas (porque simplemente no existía la piratería de juegos) y que, cuando se quedaba pegado un juego, no era por culpa de un rayón en el disco, sino que era por el polvo y soplábamos los contactos del cartucho (aunque las instrucciones decían e insistían que eso no debía hacerse), y los avances en los juegos casi nunca podían guardarse, y en los pocos juegos que se podía era gracias a un chip y una pila dentro del cartucho, y si te condoreabai y apagabas la consola sin apretar RESET, se borraba todo. Aunque a veces no pasaba nada. La tele que había en la casa en ese tiempo ya no funciona. Pero la consola aún vive. Como en su primer día.
Y los juegos se disfrutaban mucho más, porque eramos mucho más conscientes de lo que valían y costaban. Aún me acuerdo cuando quería que me regalaran el SMB3 y lo vimos en una tienda a 15 lucas.
Y 15 lucas era caro. Nooooooo, mucha plata.
En mi casa no habían muchos cassettes. De lo que habían harto eran discos long play. Recuerdo que en el closet del segundo piso había un bolso que parecía de paja -pero que en realidad era plástico- lleno de vinilos y uno que otro acetato, incluso. Mi vieja decía siempre que "están rayados". Igual me sirvieron para jugar, cuando mi abuela Sara me regaló una "Victrola" con el brazo malo y sin la cápsula. Así que le improvisé una aguja con un hilo de cobre que saqué de un cable viejo, se lo pegué al pedazo de brazo que le quedaba al aparato y hacía girar los discos con el dedo. ¡Sonaban! Aunque luego terminé por matar esos discos. Al final los tiraron todos al fondo del patio. Deben estar degradándose ya. Si es que.
Volviendo a los cassettes, como habían pocos, cada vez que mi viejo llegaba con uno era como un gran suceso. Una tarde llegó de la pega con un cassette blanco. ¿Qué tiene? le pregunté. "De todo un poco..." me dijo. Era como típico eso.
Mi viejo gustaba de escuchar radio FM las mañanas de fin de semana. Un día domingo del '87 estaba girando la perilla del equipo de música, hasta que escucho a mi vieja que venía de la cocina: "Qué lindo..." Era un programa de música orquestada con canto de aves que estaban pasando en la radio El Conquistador. De vez en cuando, la voz de Hernán Belmar decía "Los pájaros..." y algo más que ya no recuerdo. Al rato a mi vieja se le ocurrió la gran idea: "¿Y lo podís grabar?". Mi viejo agarró el cassette, le puso dos pedazos de cinta adhesiva en los huecos de arriba, lo metió a la cassettera y luego, REC-PLAY.
Fue la primera vez que veía que se podía hacer eso. Era magia.
Gracias a mi viejo, agarré con el tiempo el hábito de tener listo el cassette y esperar hasta que saliera esa canción en la radio y luego tan simple como apretar REC-PLAY.
Fue lo mismo que hice yo unos 10 años después cuando lo repitieron. Pero en ese tiempo tenía sólo un radiocassette y un cassette demo con algo de uso, de esos que traía mi viejo cuando trabajaba de guardia en la EMI. Agarré el programa casi al final, y sin la voz de Belmar. Pero logré al menos rescatar algo de mi historia. Dudo que haya otro audio con un valor emocional y personal más grande para mí que éste.
Y pensar que de esto, más de 20 años ya...
- Sonamos...
- Es que ahora todos ya sacaron sus yogurt para el tránsito lento y el Activia no lo pesca nadie, po'h... Hay que pensar en algo...
- Pensemos... ¿se te ocurre algo ahora?
- Ná.
- ¡Ya sé! ¿Y si bajamos el precio?
- P'ta que eris básico, weón...
- Y qué querí' hacer entonces. Más encima en Chile nos hacen competencia con un yogurt... "Nex" parece que se llama la hue'á... que dice haber sido probado con minas chilenas. Tamos sonaos.
- Pero igual podríamos decir lo mismo en todos los países donde ellos no están po'h...
- Tai más hueón... Si no somos la Coca-Cola po'. ¿Viste esa hueá? Más prostituídos que Lesotho...
- ¿Y es rica al menos la hueá?
- No he probado el yogurt, pero tienen un agua con gusto a guater, más mala que la cresta.
- Ya sé. Nos tenimos que diferenciar po'h, hueón.
- Le podimos llamar de otra forma, po'h. ¿Te sabís una forma distinta de decir que "ayuda al tránsito lento"?
- ...en Colombia o Venezuela parece que le dicen "intestino perezoso".
- ...que eris mamasán, como tan gil!
- Era una idea no más hueón, no te enojis. Ya sé...
- ¿Qué se te ocurrió ahora?
- ¡Hinchazón!
- (luego de pensársela un rato) oye, hueón, no es mala idea, es la misma hueá del tránsito lento, pero dicho de otra forma, po'h... si las minas no cachan ná. Podríamos hacer hasta una campaña chora...
- Con la minita del tiempo, ahi... "¡Probado contra la hinchazón!" Con eso matamos.
- ¡Te las mandaste, zorrón! Mañana mandamos a hacer una hueá rápida y la lanzamos pa' la otra semana.
- La raja, hueón.
Cuando chico, a cada rato distorsionaba las canciones. Por ejemplo, cuando escuchaba a Mocedades cantando "Tómame... o dejame..." yo entendía clarito "Tómame... ¡ORÉJAMEEEEEEEEEE!" y desde luego que me imaginaba que podría significar "orejar" a alguien... ¿tironearlo de las orejas? O cuando escuchaba a la María Conchita Alonso cantar "Una noche de copas, una noche loca..." yo entendía clarito "Una noche de TOPOS, una noche loca..." y me preguntaba por qué una noche de topos podía ser una noche loca y no me cuajaba por ningún lado. Cómo puede ser una noche loca para un topo, si ése topo que sale en la tele, cuando llega la noche, lo primero que hace el gil es ponerse a decir como menso "A la ca-mi-ta, a la ca-mi-ta..." y se ponía... ¡A DORMIR! No me calzaba por ningún lado. O sea, no. O cuando mi viejo el fin de semana ponía radios FM y salía ese temón de Starship, "Sara", y yo entendía clarito "Ceeeebra, ¡¡¡CEEEEEBRA!!!" ¿El himno de las cebras? ¿Por qué alguien le haría una canción a las cebras?
Sea como sea, esta niñita nos robó el corazón a muchos. Y ya sé que es un video "viejo", pero ni ahí, después de todo ahora, en el tiempo de la "Interneks", pasa una mísera semana y, ya con eso, se puede tachar a un video de YouTube como "viejo". Ni ahí.
Pero, sin embargo, nos deja una gran ideíta. ¿Qué pasaría si para el Mundial cantamos en el coro del himno "GOOOOOOOOOL DE CHIIIIIILE"? Sería la patá. Épico.
En la foto, el último grito de la tecnología: el nuevo "ultraportatil" de Movistar. (Fotografía de @fernastro)
Uno se imagina en una de las fantasías más fantabulosas, que se podría llegar y conectar el celular a la tele para ver los canales de su servicio de TV digital y adiós parabólica, o bien que al teléfono fijo le saliera una antena por detrás y chao cable, o que el computador ya no estuviera conectado a un módem y se le enchufara un celular o un pequeño accesorio vía USB para conectarse (espera, eso ya existe...). No, algo aún más freak: de la nada, todas las teles, computadores y teléfonos fijos se derriten y se transforman en una M fosforescente, como en su publicidad (¡qué miedo!).
No, algo aún mas simple: en la casa matriz española, decidieron que los servicios hogar y los servicios móviles compartirían una sola marca. Y el lugar para comenzar este gran cambio es... Chile. De la noche a la mañana, todos los servicios de Telefónica Chile pasaron a ser Movistar, igual que los móviles. Entonces aparecieron (y aparecerán) teléfonos fijos, TV digital e Internet "banda ancha" -cableada- de la gran M.
Chile, conejillo de indias de, si lo hubiésemos visto hace apenas unos 5 o 10 años, una locura. Razones: su madurez de mercado, su "orden" legal y su tamaño reducido, más "controlable" para revertir alguna mala decisión y que no afecte tanto. Eso por un lado. Por otro lado, implica la unificación de los canales de servicio de los dos brazos de la compañía española: los clientes tanto de servicios móviles como de servicios hogar serán atendidos en sucursales previamente Movistar como en las de Telefónica Chile que hoy se transformaron en Movistar. Todo esto también trae consigo la extensión del club de beneficios (Club Movistar) a los clientes de servicios hogar ex-Telefónica Chile. Y cual es el fin último: la convergencia. Algo que hace 5 o 10 años no era tan evidente, ahora sí lo es. Y pa' allá va todo el mundo.
Pero igual es frik. De partida, la marca: Movistar... "movi", o sea, móvil, pos. Bien raro parece en los tiempos actuales que servicios cableados lleven una marca que comienza con "movi". En el futuro quizás, cuando se hayan erradicado los cables y todo sea "movi". Ahora, es raro. Imagínate... un teléfono público "Movistar".
Vieja y querida "Compañía de Teléfonos de Chile", esa compañía que para contratar sus servicios había que inscribirse en una lista y esperar meses, esa empresa a la que sólo una pequeña "elite" podía acceder. Vieja CTC, sacúdete en tu tumba.
No quise escribir antes del tema. Me dio lata. Lata por todo lo que se dijo -y se temió- del asunto. Señores de los medios grandes, y especialmente de cierto publidiario, tienen todos un uno. Ahora que de a poco vamos a entrar pronto a discutir y ejercitar la sesera con otros no-temas, aprovecho de confirmar lo que digo en el título. La "influenza humana", para mi en su momento, fue una mala película de zombies. Zombies de los que se tiene noticia que llegan, muerden y expanden su "sarnosidad" a todo a quien encuentren.
A ver, una enfermedad para la cual no hay vacuna ni cura existente, que se propaga por contacto y que no han podido parar en ninguna parte. Los medios nos vendieron eso todo el rato.
¿El mayor fracasado? El gobierno. Sin ánimo de repetir el descalabro económico mexicano, su primer atisbo de tratamiento del tema fue evitar a toda costa que llegara el bicho al país. Cuando se dieron cuenta que no les resultó, le bajaron el perfil al tema. "Para no alarmar", seguramente. Es que nuestra gente es tan tonta...
Pero la verdad... es que no le da ni para culebrón venezolano. Ni para sketch de colegio. Es una gripe como cualquier otra, la mortalidad es bajísima, algunas personas resultaron asintomáticas y, aunque atacó primero y más masivamente a cierto sector socioeconómico -por el que casi cambió de nombre jocosamente a AH1-ABC1-, no deja de ser cierto que en términos de plata están mejor preparados para una enfermedad que no es barata, partiendo por el famoso Tamiflú. Pastilla de mierda que la "gente bien" se las arregló para conseguirla a través del "médico amigo" que les diera la receta. En el sistema público, bien, gracias. 7 hora de espera por lo bajo. Y le dan la pastilla al enfermo no más. La familia, que se chingue.
Pa' la otra, tráiganse zombies de verdad, negros, feos y sudacas, con pinta de flaite poblacional y una hessshiza en cada mano, sin pelo rubiecito ni posibilidades de viajar a resorts de lujo. Aunque de lejitos no más.
* Fotografía de Sir Sabbhat (CC BY-SA 2.0)
Así es que hoy repito la experiencia. Recibo fotos de cualquier tipo (y cuando digo "cualquier tipo", es eso, cualquier tipo). Obviamente, debido a lo anterior, me reservo la decisión de publicar cada foto recibida. Y a propósito de publicar, asumo que me cedes los derechos, a menos que expresamente me indiques que la foto puede publicarse bajo una licencia de Creative Commons. Todo a través del correo electrónico que aparece en el afiche que dedicadamente he copiado y que con un gran esfuerzo le he chantado un "2" encima. Si había quedado tan bonito, ¿pa qué hacer otro?
Actualización: Para que no sea tan personal y sea más entrete y público, me sugirieron por interno que cambié la mecánica de participación: ahora hay que subir la foto a flickr con el tag "regalamepreto" (asegúrate que sea pública). A medida que vayan llegando, si llegan bastantes, podrán verse en el costado izquierdo del blog. Demasiado entrete.